Día a día, encontramos pacientes que le restan importancia a la necesidad de ponerse implantes dentales. Esto se debe, en muchos casos, a que existe la creencia infundada de que “no pasa nada por perder un diente”. Además, muchas personas lo consideran prácticamente un tema estético que puede esperar indefinidamente sin provocar ningún perjuicio a su salud.
La realidad es que el implante dental cumple todas las funciones de un diente natural, más allá del aspecto visual. Por ello, desde el Centro Brånemark Las Palmas, os queremos contar por qué son importantes los implantes y cuando aconsejamos su uso.
¿Por qué debo utilizar implantes dentales?
Los dientes no deben considerarse como piezas separadas, sino que forman parte de toda la estructura dental. Por lo que cada arcada dentaria necesita el equilibrio que le proporcionan todos los dientes en su conjunto.
Cuando se pierde un diente, ya sea por un traumatismo o una extracción, y no se sustituye por un implante, se producen una serie de cambios en la boca que pueden afectar negativamente a tu salud dental.
- Las piezas adyacentes al diente ausente se pueden desplazar o incluso inclinarse o moverse hacia el hueco. Además, esto no solo ocurre en los dientes de la misma arcada, sino que el diente homólogo superior o inferior se pronuncia hacia el hueco, intentando contactar con el diente perdido.
- Con el desplazamiento de los dientes pueden darse problemas de oclusión al no coincidir las arcadas dentarias. Lo que provoca desde dificultades para comer, hasta dolores en la mandíbula o cefaleas.
- La zona ósea, que anclaba el diente y lo sostenía, deja de cumplir su función y comienza su pérdida. Esto deriva en un hundimiento visible de la encía.
- La encía descubierta es, además, un foco para la acumulación de bacterias. Se corre el riesgo de padecer enfermedades periodontales o caries en las zonas colindantes.
- Se dificulta la masticación, llegando a dañarse la mucosa de la encía desprotegida.
- Las piezas dentales sanas tienen que hacer el trabajo del diente perdido, por lo que se sufren mayor desgaste dental.
Por lo tanto, este problema no solo afecta a la estética y recomendamos colocar implantes dentales si las condiciones lo permiten.
¿Cuándo es aconsejable poner implantes dentales?
Es cierto que de manera general se aconseja ponerse implantes dentales en el caso de pérdida o extracción dental, pero existen condicionantes para ello. Para saber si puedes colocarte implantes dentales nuestros especialistas de Las Palmas pueden orientarte.
No todo el mundo puede optar a los implantes dentales, y, al contrario de lo que pueda pensarse, no depende de la edad del paciente.
Los implantes dentales pueden ponerse siempre que las estructuras óseas se hayan desarrollado por completo, en torno a los 20 años, y no hay máximo de edad para ello. Ser apto o no para los implantes dentales depende exclusivamente de las condiciones orales previas.
Cuando se valora colocar un implante dental se tienen que cumplir una serie de requisitos:
- Tener suficiente cantidad ósea en los maxilares. Los implantes dentales se sustentan sobre esta superficie y, aunque existen opciones de injertos óseos, no todo el mundo es apto para ello.
- No padecer enfermedades periodontales. En el caso de que se detectase cualquier enfermedad dental hay que solucionarla de forma previa.
- No estar embarazada. Se recomienda esperar a acabar la gestación para evitar cualquier riesgo si fuera necesario el consumo de antibióticos.
- No tener ninguna enfermedad de riesgo: diabetes, enfermedades cardiovasculares, problemas de coagulación… Y, en caso de padecer alguna enfermedad, siempre se consultará y será valorado el caso de manera particular por el cirujano.
Todos estos factores influyen en la decisión de proceder o no a colocar implantes dentales, pero como cada caso es diferente, siempre hay que acudir al dentista para tener un diagnóstico claro y detallado.
Para conseguir un tratamiento orientado a tu situación, pide cita y visítanos en nuestra clínica Brånemark Las Palmas de Gran Canaria. Podemos ayudarte a volver a sonreír.
